Una vecina nos contactó y nos contó que su vecino mantenía un burro enfermo, con las patas sangrando y que no estaba recibiendo ningún tipo de atención. Tras hablar con su vecino este accedió a ceder a Isabel (ese es el nombre que le pusimos tras conocer que jamás le habían puesto nombre).
Isabel tiene más de 23 años, no sabemos exactamente cuantos, en 23 años no había recibido atención veterinaria y vivía en un espacio pequeño sin la compañía de otros animales. Viajamos durante horas a Elche para su traslado el 15 de julio de 2021 y lo primero que hizo Isabel al vernos fue abrazarse a Laura como sabiendo que íbamos a ayudarla.
Isabel tiene una grave infección de piel, su piel se ha cuarteado y sangra. Los cascos también muy descuidados. Aquí recibirá las atenciones, el cariño, los cuidados veterinarios y la compañía de otros burros mayores como ella que la ayudarán a disfrutar de la vida que durante más de 23 años no ha tenido.
A su llegada la burrita Rita fue la gran anfitriona y la ayudó a que se sintiera como en casa. Desde entonces ellas son amigas inseparables y siempre las puedes ver juntas por su parque, con todos los cuidados y las atenciones que necesitan en su tercera edad, felices y totalmente a salvo.