Rita tiene ya 26 años, pero le sigue encantando hacer la croqueta.
Lleva en Santuario Vegan desde la primavera de 2013 y la rescatamos de una situación de abuso y explotación en la que decomisaron muchos animales a un ganadero. Y desde entonces ha sido feliz, aunque ha perdido a dos grandes amigas que eran aún más mayores que ella.
Pero eso no ha hecho que ella se venga abajo, si no que se ha recuperado de cada pérdida y sigue disfrutando de la segunda oportunidad que empezó en aquel abril de hace casi 9 años.