Algarrobito comiendo zanahoria es algo que tienes que ver. Y luego llega Ivana, que se apunta a todo.
Algarrobito es encantador y no parece que tenga 32 años. Se lleva bien con todos los habitantes y siempre está tranquilo esperando a que, con suerte, alguien sucumba a sus encantos y le den alguna golosina o mimos.
Vivía en una situación terrible que duró 30 años, explotado toda su vida, y hoy es feliz al fin.
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La fundación Santuario Vegan es un centro de rescate y recuperación de animales considerados de granja, víctimas de la explotación ganadera, abandono o maltrato.
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