
No existe nada más bonito que la belleza de los animales rescatados.
Haryana es una vaca de 20 años que vivió toda su vida junto a su compañera Ivana, atada en una cuadra a oscuras en Álava y sin poderse mover. Año tras año tenían terneros que eran enviados al matadero. La única felicidad era cuando una vecina les llevaba manzanas. Por su edad ellas también iban a ser enviadas al matadero y la vecina contactó con nosotros. Ivana y Haryana tenían tanto miedo al salir de su cuadra que tuvieron que taparle los ojos. Tras un largo viaje llegaron al santuario donde han aprendido a andar, a correr, a saltar y a seguir teniendo sus adoradas manzanas, han vuelto a nacer.
Ahora Haryana recibe cariño, sufre artrosis aunque la medicación le ayuda a tener calidad de vida y lleva flores que le hacen ser la vaca más guapa, y vive libre y amada, como todas las vacas deberían vivir.