
Compartimos estas bonitas palabras de Eduardo Terrer, cofundador de Fundación Santuario Vegan:
“La felicidad es fácil de hallar allá donde hay animales.
A mi lado Haize, un caballo que sufrió una terrible llegada al mundo y pudimos rescatar. El otro soy yo, un mero espectador de esto que llamo Santuario.
No os imagináis la de historias que he vivido durante todos estos años, de animales que han luchado por su vida, que han huido o han soportado lo inimaginable. Que han aguantado gracias a los cuidados y algunos que no han podido continuar.
He sido espectador de sus dramas y sus luchas, de su alegría brutal cuando encontraban eso que llamamos amor, que llamamos cariño y que llamamos familia.
Es tan bonito ver cambiar el brillo de sus ojos cuando sienten que han llegado por fin a ese lugar que anhelaban, como triste es ver cuando se apagan en un último adiós.
Ser espectador de algo así y poder participar en su historia para cambiarla es, quizás, lo más bello que puede haber. Una acción que se transforma en poesía cuando, ayudando a un animal, dejas este mundo un poco mejor de lo que lo encontraste”.