Quejigo ha crecido mucho, pero sigue adorando a Laura Luengo Mata, que lo cuidó y fue su madre adoptiva cuando él era pequeño.
Eso sí, una vez le hace cariños a alguien de la guardería de cuidados especiales, enseguida va el resto a conseguir que le haga caso también. En el vídeo veréis también a Menta, Madroño y a Rob.
Todos ellos fueron rescatados de bebés y criados aquí. Y ahora son felices conviviendo y siendo una adorable familia.