Acabamos de cambiar todos los vendajes de los habitantes con necesidades especiales y han quedado muy bien.
Cada poco tiempo hay que cambiar los vendajes de los animales que necesitan férulas o refuerzos para sus extremidades. Y cuando llueve hay que cambiarlos antes de tiempo.
Luego se quedan así de bien, como Madroño, que está más feliz que un cerdito en una charca.