Vais a morir de amor 





Ricki y Marino cenando juntos (o casi juntos).
Nos resultaba muy importante que se tolerasen bien antes de acostumbrarse a ser compañeros de piso y por ahora está yendo todo súper bien.
Tened en cuenta que Marino y Ricki tienen, los dos, un estado de salud delicado y si se alteran en conflictos puede sentarles muy mal.
Así que ver a los dos comiendo a escasos metros es una buenísima noticia 




