Estamos súper contentos porque esta tarde por fin, tras semanas de incapacidad para rumiar, por fin la hemos visto haciendo esto tan maravilloso que es la rumia. Y no se le caía el bolo, que es lo que le llevaba sucediendo desde hace tanto tiempo. Ahora a asegurarse que come, recupera fuerza y se llena de energía para seguir luchando por vivir.
No sabéis el trabajo que da intentar recuperar animales como ella, pero es tan importante para que cambiemos la forma de verles y nos demos cuenta que sus vidas son tan valiosas como para luchar por cada una de ellas hasta el final…