Sandra en su silla de ruedas es una cabrita feliz.
Todos los días hace rehabilitación para fortalecer la parte posterior y le encanta ese momento de juego y ver a quienes serán sus compañeros y familia. Y aunque con este frío le encante estar calentita, no deja de ser una bebé y le gusta más aún jugar.
Milagrito jugando con su papá adoptivo.
Amadrina a Milagro Milagro jugando con su papá adoptivo Hace unos días Milagro sufría una crisis respiratoria. Tan sólo tiene un 40% de la capacidad pulmonar debido a la neumonía