Al final han tenido que amputarle la pierna a Valeria, la coneja que ingresamos el otro día porque se había fracturado el fémur por tres puntos diferentes.
Cuando empezaron la cirugía vieron que tenía una terrible infección y que no podían salvar la extremidad. Ya está en el Santuario y vamos a ver cómo evoluciona. Aunque es una coneja grande, se puede apañar bien con tres extremidades.
Valeria fue rescatada en 2013 de la experimentación animal y ha sido feliz desde entonces.
Su operación se suma a la elevada deuda que llevamos acumulando por la mala racha de urgencias que hemos pasado, incluidos los últimos rescates.